Guayaquil, (DCAG).- El último candidato al sacerdocio que conoceremos es Luis David Zambrano Cortez, guayaquileño que, a pesar de varios eventos desafortunados en su vida, en una visita al Santísimo descubrió que Dios lo estaba llamando al sacerdocio.

Es el menor de cuatro hermanos, siendo el único varón. Creció junto a su madre, ya que su padre falleció cuando Luis David tenía solo cinco años de edad. Estudió en la escuela Pablo Baquerizo Nazur y sus estudios secundarios los realizó en el colegio Interamericano.

Al ser el único hijo, su madre había planificado una vida en Estados Unidos donde ella vivía. Luis David ya tenía la residencia norteamericana, pero en el camino había decidido que su vocación era el sacerdocio cuando en una visita al Santísimo tuvo una experiencia de plenitud del corazón al tener la certeza de que Dios no es una idea etérea sino una persona que te abraza y que carga en sus hombros el sufrimiento del hombre y que cuando nos abrimos a él, fue llenando los vacíos que tenía en su alma.

Desde ese momento supo que, al haber recibido ese regalo tan grande de encontrar felicidad en su corazón y respuestas, debía entregárselo a las demás personas. Tras culminar su etapa colegial, debía anunciarle a su familia su decisión de ingresar al Seminario Mayor de Guayaquil.

Primero, habló con sus hermanas mayores para que le paguen el pasaje de regreso en caso de que su mamá no lo dejara regresar, ya que había decidido ser sacerdote en Guayaquil. Luego, viajó a los Estados Unidos para decirle personalmente a su mamá sobre su decisión. Para ella fue un golpe muy duro y al inicio no comprendió el llamado que su hijo había recibido de Dios. Actualmente, su madre se siente feliz por el camino que ha tomado Luis David e incluso ha retomado su fe cristiana.

Para Luis David, “el sacerdocio es la respuesta a todos los deseos que todo hombre tiene en el corazón y hacerlos presentes mediante mi persona y ser el instrumento para que todas las personas puedan alcanzar su felicidad que se encuentra en Dios”.

En estos días previos a su ordenación sacerdotal, ha sentido esa cercanía con los obispos y el tener la certeza de encontrarse con otra familia con la cual puede compartir y a pesar de que ha dejado muchas cosas por seguir a Dios, se le ha devuelto el ciento por uno. También, siente la emoción de que pronto podrá celebrar la Santa Misa, perdonar los pecados y rezar por la feligresía de Guayaquil, siendo ese instrumento para darles paz.

Durante su año de servicio como diácono, Luis David Zambrano estuvo en el servicio parroquial de la iglesia Santa Teresita de Entre Ríos, en Samborondón.

Guayaquil, (DCAG).- Víctor Rolando Contreras nació el 21 de agosto de 1987 en Santo Domingo de los Tsáchilas. Es el menor de sus hermanos trillizos y desde muy pequeño tuvo un gran amor por la Santa Misa, aunque su proyección fue dedicarse a los estudios, obtener su profesión y tener una familia; Dios le mostró otro camino de vida por medio del sacerdocio.

Tras obtener su título como Diseñador Gráfico Publicitario, ejerció su profesión durante dos años, en los cuales fue discerniendo las señales que Dios le dio para mostrarle que necesitaba de él algo más. “Fue un camino de discernimiento personal que me hizo ver la historia de mi vida y como Dios estuvo en todo momento”, recordó.

Su vocación sacerdotal la descubrió al no hallar el sentido completo a todo lo que hacía; a pesar de tener una familia que lo quiere, una profesión y un trabajo estable descubrió que Dios lo estaba llamando a su servicio. Su discernimiento lo mantuvo en silencio hasta que decidió ingresar al Seminario y unas horas antes le contó a su familia sobre su decisión, quienes lo apoyaron. Su hermano mayor le dijo: “Te apoyaremos, pero pon de tu parte porque esto es algo muy especial y lo que ahora empiezas lo vas a culminar”.

En su proceso de formación, tuvo varias experiencias en misiones en el oriente ecuatoriano, donde acudió a comunidades indígenas que se encontraban a más de nueve horas de camino, en ocasiones acampaban en las orillas del río para continuar al siguiente día. Rolando recuerda que en su primera visita tuvo un choque cultural cuando los aborígenes le dieron como bienvenida un mate con chicha, sabor al que luego se acostumbraría; compartiendo muchos momentos con ellos en su misión evangelizadora.

En sus días previos a su ordenación sacerdotal, Rolando se siente nervioso y emocionado a la vez por el momento tan trascendental en su vida y esta nueva etapa de su vida. “A los jóvenes que sienten el llamado a servir a Dios; no tengan miedo, que se abran al corazón de Cristo que nos abraza y al de María que nos enseña a decir sí”, mencionó.

Guayaquil, (DCAG).- El primer candidato al sacerdocio que conoceremos es Gerhald Nevil Burham Villacreses, nacido el 17 de agosto de 1996 en Guayaquil. Desde su juventud sintió la chispa del llamado de Dios al sacerdocio como una forma de retribuir el amor infinito del Señor.

Tras empezar el proceso de discernimiento, decidió ingresar al Seminario Mayor de Guayaquil donde se preparó durante 7 años. “En ese tiempo puede pasar cualquier cosa, pero dios te demuestra que está contigo y su misericordia. Cuando uno ha recibido el ministerio del diaconado tiene esa certeza de que Dios realmente te ha llamado al imponerte las manos”, explicó.

Gerhald cita al Papa Francisco para definir al sacerdote como “aquel hombre de acogida y escucha que basta con una palabra o un gesto a aquella persona que está devastada por muchas situaciones, pero que busca en el sacerdote principalmente a Dios”.

Está consciente que como todo hombre tiene sus defectos y dificultades, pero que la voluntad de Dios se cumple en aquel que ha elegido y que por medio de las pequeñas señales van confirmando la vocación hacia el sacerdocio. Tras culminar su formación y recibir su investidura como diácono, fue enviado al Santuario Señor de los Milagros en Daule para ayudar en las actividades parroquiales.

A los jóvenes que tienen vocación sacerdotal, Gerhald les recomienda que se acerquen a su sacerdote confesor o párroco para ir despejando sus dudas; ya que en muchas ocasiones no toman la decisión por la incertidumbre o la opinión adversa de sus familiares; ya que Dios devuelve todo lo que se pierde por seguirlo y aunque no es un camino fácil la recompensa es la vida eterna.

Guayaquil, (DCAG).- En la Catedral Metropolitana de San Pedro Apóstol, el próximo 29 de abril a las 10h00 se llevará a cabo la ordenación de tres nuevos presbíteros y un diácono, los cuales entregarán su vida al servicio de Dios en la Santa Madre Iglesia.

El candidato al diaconado es el seminarista César Lema Castillo, perteneciente a la comunidad Stella Maris. Nacido en Guayaquil el 10 de octubre de 1993, cuenta que en su niñez no estuvo apegado a la fe cristiana, pero una invitación de un sacerdote lo animó a acercarse a la Iglesia e ir conociéndola de a poco y comprender que no es un lugar lejano donde solo se puede rezar, sino que puedes encontrar una fraternidad, amigos o una nueva familia que te ayuda a crecer en virtudes.

En ese proceso fue cuando se dio cuenta del llamado que Dios le hizo hacia el sacerdocio y decidió ingresar al Seminario donde profundizó en el conocimiento de Dios y de su Iglesia. Para César, “la vocación es un servicio donde el Señor te da y te ofrece un nuevo estilo de vida para servir” y se siente feliz de haber sido uno de los elegidos para el sacerdocio.

Durante los días previos a la ordenación diaconal, César ha sentido la mezcla entre la alegría y el nerviosismo por ser investido como siervo del Señor. “El amor surge del conocimiento y los invito a que se acerquen a la Iglesia, busquen los grupos parroquiales, conozcan la realidad y sepan que los acogen y que al acercarnos a Dios miremos su obra: la Santa Iglesia».

Guayaquil, (DCAG).- Jóvenes, grupos eclesiales y familias enteras se dieron cita el pasado 25 de marzo para celebrar el Día Internacional del Niño por Nacer en la Catedral Metropolitana de Guayaquil, donde se presentó a la advocación mariana de la defensa de la vida. Las mujeres embarazadas y las parejas que no pueden concebir recibieron la bendición del Arzobispo de la ciudad.

Una caravana motorizada con la campana “La Voz de los No Nacidos” desde la parroquia San Alberto Magno hasta la iglesia San Francisco inició la mañana del pasado sábado la celebración del día dedicado a la defensa de la vida.

En la tarde, las cientos de personas que concurrieron a la Catedral Metropolitana San Pedro Apóstol iniciaron con el rezo del Santo Rosario. Luego participaron de la presentación de la virgen “Madre de la Dulce Espera” que fue designada como la patrona de la defensa de la vida. La Santa Misa fue celebrada por Mons. Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, y varios sacerdotes de la ciudad.

Para Génesis Pilataxi, el saber que hay una misa para los bebés que están por nacer la llenó de alegría y regocijo. “Al escuchar al sacerdote hablar sobre la bendición de ser mamá y al mencionar a los niños abortados me conmovió y se me salieron las lágrimas porque hace dos años yo perdí a mi bebé. Luego me sentí bien cuando el Arzobispo nos llamó para bendecirnos, tocó mi barriguita y me sentí a gusto y tranquila”, comentó.

La Municipalidad de Guayaquil también se unió a esta celebración con la iluminación de los principales monumentos de la ciudad como el Palacio Municipal, la Torre Morisca, la iglesia San Francisco, el faro del cerro Santa Ana y la imagen del Sagrado Corazón de Jesús en el cerro del Carmen.

Guayaquil, (DCAG).- Con un estilo neoclásico, el santuario María Auxiliadora es el primero en su tipo en Guayaquil. Su construcción fue impulsada por los salesianos y apoyada por la comunidad del barrio Centenario, inaugurándolo en 1928.

La historia del primer santuario de la ciudad se remonta a la llegada de los misioneros salesianos desde Italia; quienes cimentaron la actividad comunitaria, el pensamiento y la acción de Don Bosco hacia la educación y la acción pastoral; entre los que destacan los sacerdotes Domingo Comín, Alfonso Rinaldi, Pascuale Sanfrini y Cayetano Tarruel.

En 1911, tras la apertura del colegio Cristóbal Colón, el P. Salvador Durone manifiesta la intención de crear un gran templo en honor a María Auxiliadora y con ese fin se abrieron los Comités de cooperadoras y la Archicofradía. El 1920 se creó el barrio El Centenario y el Comité pro-construcción del templo de María Auxiliadora, un proyecto original del P. Francesco Sanguinetti y el arquitecto Paolo Russo, con la participación de Luigi Bertagno.

El 10 de julio de 1921, con la presencia de la Colonia Italiana, se coloca la primera piedra del nuevo templo en el terreno ubicado en la Av. Domingo Comín y calle 36 SE; siendo uno de los primeros de hormigón armado de Guayaquil. En 1925, la Compañía Italiana de Construcciones Salesianas, que edificó el Palacio Municipal, asume la construcción de la colosal iglesia. Con Carlos Bartoli, Cherrardi y Bonardi al frente.

Ese mismo año, el Comité de las Señoras Italianas se reunió en la casa de la familia Descalzzi para hacer un voto para la culminación de la obra, organizando una gran misa campal en los terrenos del santuario y diferentes actividades para recaudar fondos para el templo. El 24 de mayo de 1928 se da cita una gran muchedumbre para presenciar la bendición y la apertura oficial del santuario de María Auxiliadora, ícono de la grandeza de Dios y lo que hace posible la fe de un pueblo.

En 1934 se inició el proyecto de la construcción del altar mayor, el baldaquino, el balaustro y otras. Para 1939 se construyen las losas laterales. Al año siguiente; las molduras del zócalo, el altar mayor y el comulgatorio, obra de Emilio Soro Lenti, y dos puertas de los dos sagrarios, hechas con bronce, obra de Attilio Castano. Ya en 1942 las naves laterales se construyeron en su totalidad, y el dos de junio de ese año, el entonces obispo Pedro María Noboa las bendijo.

El santuario María Auxiliadora está abierto de lunes a sábado de 06h45 a 12h00 y de 15h00 a 19h00. Las misas son de lunes a sábado a las 07h00 y 19h00, mientras que los domingos hay horarios de 07:00 – 08:30 – 10:00 – 11:00 – 12:00 y 19:00.

Guayaquil, (DCAG).- La Arquidiócesis de Guayaquil prepara la 16º edición del Día Internacional del Niño por Nacer, a realizarse este 25 de marzo en la Catedral Metropolitana San Pedro Apóstol. Se celebrará la tradicional Misa por los no nacidos y varias actividades para reforzar el compromiso en defensa del derecho constitucional a la vida desde la concepción.

La jornada iniciará en la Caravana por la Vida a las 09h30 desde la parroquia San Alberto Magno (La Aurora) hasta la plaza San Francisco. A las 16h00, en la Catedral Metropolitana (Chimborazo y 10 de Agosto) se rezará el Santo Rosario, para luego celebrar la Santa Misa del Niño por Nacer, oficiada por Mons. Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, y varios sacerdotes de la ciudad.

Durante la Eucaristía, se bendecirá a las madres embarazadas y a los matrimonios que piden la gracia de concebir. La pastoral de los Niños por Nacer presentará al público a la Virgen “Madre de la Dulce Espera” como su Patrona, para poder acompañar espiritualmente a todas las madres que atraviesan embarazos vulnerables, y reforzar en la juventud la “Cultura de la Vida”.

Para Martha Villafuerte, coordinadora de la jornada, «que se siga celebrando el Día del Niño por Nacer es una reafirmación anual de que somos una gran familia guayaquileña que sigue fiel a su esencia de amar, respetar y defender la vida desde la concepción. La familia es la cuna donde este amor por la vida se debe sembrar«, destacó.

San Juan Pablo II impulsó la celebración del Día del Niño por Nacer, coincidiendo con la solemnidad de la Anunciación, donde la Virgen María da el “Sí” para concebir al Mesías. Desde 1999, varios países del continente se han unido a esta causa provida, adhiriéndose Ecuador el 1 de junio de 2006 con el decreto presidencial No. 1441.

La Arquidiócesis de Guayaquil impulsa la defensa de la vida y la prevención del aborto a través de sus filiales Proyecto Esperanza, Casa de la Vida, Pastoral de los Niños por Nacer, banco de alimentos Diakonía; y diferentes iniciativas parroquiales en favor de la familia.

Guayaquil, (DCAG).- El santuario Santa María Madre de Guayaquil es el más reciente lugar de peregrinación de la ciudad, cuya imagen oficial nació de la necesidad de los feligreses guayaquileños por tener una advocación propia de la Virgen María. Se encuentra ubicado en Mucho Lote I y actualmente, continúa en construcción.

La advocación mariana de Santa María Madre de Guayaquil nació en 2011 cuando Mons. Antonio Arregui, entonces arzobispo de la ciudad, constató la gran devoción mariana de los guayaquileños y consideró que faltaba “una mirada a la Virgen como Madre de Guayaquil”.

El artista Arturo Guerrero fue el encargado de plasmar en el lienzo la imagen de la Virgen María de tez morena, cabello suelto sin velo, vestida de blanco y un manto celeste. En sus brazos sostiene al Niño Jesús que con su mano derecha acaricia el rostro de su madre y con la mano izquierda le entrega una flor.

Tras la presentación de la advocación en 2011, la Municipalidad entregó en comodato un terreno ubicado en la V etapa de Mucho Lote I. Después se iniciaría la construcción de una pequeña capilla de caña para rendir culto a la Madre de Dios. El Papa Francisco en su visita a Guayaquil en 2015 bendijo el cuadro original. Un año después, se daría inicio a la procesión anual (tercer sábado de julio) hacia el terreno del santuario.

Con el apoyo de los feligreses, empezó la construcción del templo actual que tras la finalización de la obra se convertirá en la capilla eucarística. Además, el complejo religioso contará con un templo principal, su campanario y un viacrucis en los alrededores del santuario.

La oración oficial de Santa María Madre de Guayaquil fue escogida en un concurso en 2019, donde María Alexandra Macías Cedeño ganó el primer lugar. Mientras que la canción oficial fue compuesta por Jofre Soria y su esposa Ingrid de Soria y lanzada en julio de 2020.

El Santuario Santa María Madre de Guayaquil abre sus puertas para la adoración eucarística de martes a jueves de 05h00 a 19h00. Los horarios de misa son de martes a sábados a las 19h00 y los domingos a las 07h00 – 09h00 – 10h30 – 17h30 – 19h00.

Guayaquil, (DCAG).- Con el objetivo de ayudar al crecimiento económico de las mujeres, el pasado 8 de marzo, la Arquidiócesis de Guayaquil suscribió un convenio para la implementación del proyecto “Microemprendimiento San José Obrero” en toda la ciudad, iniciativa implementada por el P. Colin MacInnes en el sector de Balerio Estacio.

El proyecto inició hace más de 10 años, cuando el sacerdote escocés llegó como misionero al noroeste de Guayaquil, donde al evidenciar la pobreza y el desempleo decidió usar sus ahorros para crear una banca solidaria que brindara pequeños préstamos a las mujeres del sector para la implementación o mejoramiento de pequeños negocios. Con el convenio firmado, el proyecto se extenderá a otros sectores de la urbe.

“El éxito del proyecto depende del concepto de solidaridad mutua, formamos un grupo de 10 a 15 personas quienes reciben el dinero y lo distribuyen entre sus miembros en base a su capacidad de pago. Se forma un ambiente de mutua ayuda porque todos son responsables, si alguno de los miembros tiene un inconveniente para cancelar su cuota semanal”, explicó el P. Colin.

Tras la creación de los grupos de mujeres; se les brinda capacitaciones sobre diversos temas relacionados al emprendimiento y la gestión de sus finanzas, se analizan los proyectos que presente cada una de las miembros y se procede a la entrega de un monto de hasta $500, con un interés del 9% (préstamos menores a $200) y 12% (mayores a $200), que son cancelados en un plazo de 16 semanas.

El proyecto “Microemprendimiento San José Obrero” se ejecuta actualmente en las parroquias San José Obrero y La Consolata, en el noroeste de Guayaquil. Las mujeres interesadas en formar parte del proyecto pueden acercarse a las oficinas de las iglesias mencionadas.

Guayaquil, (DCAG).- El Santuario Nuestra Señora de la Elevación es un templo dedicado a la Virgen María, ubicado en la Cdla. La Chala (suroeste de Guayaquil), cuya devoción se remonta a una aparición mariana en Ambato en 1695.

Todo inició en 1971 cuando el P. Hugo Vásquez Almazán llegó a La Chala para construir una capilla y una casa parroquial. Consiguió dos terrenos en la calle Segunda e inició la construcción. Mons. Bernardino Echeverría Ruíz, entonces arzobispo de Guayaquil, dio su apoyo para que la capilla se convirtiera en un templo, dedicado a Nuestra Señora de la Elevación, a la que era muy devoto.

Esta advocación mariana es propia de Ambato. En el amanecer del 13 de noviembre de 1695, la Virgen María se le apareció al indígena Juan Chacarín en una piedra gigante en una zona rural denominada Chiquicachua para advertir que el pueblo recibiría un castigo terrible si no hacían penitencia por sus pecados; siendo este el terremoto de 1698 que destruyó gran parte de Ambato y que inició con la devoción a la Santísima Madre Dios.

Tras conseguir ayuda extranjera, el templo pudo ser una realidad, convirtiéndose en una parroquia el 18 de agosto de 1974, desmembrando su territorio de la parroquia Espíritu Santo. Ante la afluencia de personas y el gran cariño del Arzobispo por la Virgen María, el 6 de enero de 1984 la parroquia Nuestra Señora de la Elevación fue erigida como Santuario Diocesano. Su fiesta se celebra cada 13 de noviembre, donde los feligreses realizan la novena y la procesión en su honor.

En el Santuario Nuestra Señora de la Elevación atiende de martes a sábado de 14h00 a 17h00. Las misas son de martes a viernes a las 19h00 y los domingos a las 08h00 – 10h00 – 19h00.

Guayaquil, (DCAG).- El Santuario Nacional de Schoenstatt Guayaquil fue el primero de su tipo en Ecuador, inaugurado y bendecido en 1972, se encuentra ubicado en el norte de Guayaquil. Actualmente, recibe a todos los feligreses que buscan encontrarse en oración y silencio con la Madre de Dios.

“Forjar un hombre nuevo en una nueva comunidad, a imagen de María y para ello nos regala una herramienta: el Santuario de Schoenstatt” es el lema del movimiento, cuya espiritualidad se basa en las tres gracias que la Virgen María brinda a sus devotos: cobijo, transformación interior y envío apostólico.

Su historia se remonta a la fundación del Movimiento Schoenstatt en 1914 por el P. José Kentenich y su posterior llegada a Ecuador en 1960, de la mano del P. Juan Fernando Marín, sacerdote español que tras un viaje a Chile decidió crear el primer grupo dedicado a la Mater, al que se unieron varias jóvenes de entre 15 a 17 años.

Con el paso de los años, la familia de Schoenstatt fue creciendo y surgió la necesidad de un lugar para reunirse, logrando adquirir el terreno en la urbanización San Felipe (Km 4.5 de la av. Juan Tanca Marengo y Av. Del Santuario), el cual fue inaugurado el 20 de enero de 1972 por Mons. Bernardino Echeverría, entonces arzobispo de Guayaquil, y bautizado como “Familia del Padre, Hogar para el mundo”.

Cuenta con una capilla idéntica a la original, ubicada en Schoenstatt (Alemania); en cuyo interior se encuentra la imagen de la Virgen María; un templo para peregrinos, casa de retiros y amplios jardines que los feligreses pueden recorrer. Uno de sus visitantes más ilustres fue el Papa Benedicto XVI (Joseph Ratzinger), quien como Cardenal participó de un Congreso Mariano en 1978.

El Santuario Nacional de Schoenstatt tiene sus puertas abiertas de lunes a domingo de 07h00 a 13h00 y de 14h00 a 20h30: Los horarios de Misas son: lunes a las 08h00, martes a sábado 07h30 y los domingos a las 10h00 – 12h00 – 19h00.

Guayaquil, (DCAG).- Como una actividad para fomentar el deporte y la unión familiar, el pasado 11 de febrero se llevó a cabo el I Ciclopaseo por la Jornada Mundial del Enfermo, donde más de 50 personas recorrieron 5.6 km por el suburbio y oeste de Guayaquil. La jornada fue organizada por la parroquia Cristo Rey y la Agencia Municipal de Tránsito (ATM).

Niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad se dieron cita en las calles 39 y Colombia para participar de esta actividad deportiva. El P. José Hinostroza, párroco de Cristo Rey, se reunió con los participantes y les dio la bendición antes de iniciar el recorrido. Los ciclistas iniciaron el trayecto por el suburbio porteño con la guía de los agentes de la ATM. 

“Estamos preocupados de ayudar en la formación integral de nuestros feligreses, no sólo con las charlas para las familias, la catequesis, la Santa Misa; también queremos fomentar la parte deportiva a través del ciclopaseo, promovemos la unión familiar donde padres e hijos participan y es un momento especial para que todos podamos disfrutar sanamente”, explicó el P. José Hinostroza.

El recorrido fue por la 39 y Camilo Destruge, luego tomaron la 36 con rumbo a la calle Francisco Calderón, subieron por la 33 hasta tomar el puente Barcelona donde hicieron una parada técnica; tras unos minutos de descanso continuaron el trayecto hasta el redondel de la PJ y retornaron para cruzar el puente Patria y continuar por la calle 38 con rumbo hacia la parroquia Cristo Rey. Los ciclistas que tuvieron desperfectos mecánicos en sus bicicletas o descompensaciones médicas fueron auxiliados por el grupo de ciclismo “Angels on Bike” y los agentes de tránsito.

Los participantes se mostraron contentos de haber participado en el ciclopaseo, una de ellas fue María Villavicencio, quien llegó con sus primos y hermana para participar de esta actividad. Oswaldo Romero a sus 56 años también completó el recorrido al que calificó como “muy bonito para divertirse y hacer deporte”.

Se prevé que la iniciativa sea replicada por otras parroquias de Guayaquil para fomentar la salud entre los feligreses.

Guayaquil, (DCAG).- Tras un proceso de formación iniciado en julio de 2022; el pasado 31 de enero, 37 estudiantes de décimo año de educación básica fueron los primeros graduados de la “Escuela de Líderes Cristianos”, quienes presentaron diversos proyectos enfocados en problemas sociales del Ecuador. La iniciativa es impulsada por la Red Educativa Arquidiocesana (REA) y la agencia Intalent.

La prevención del consumo de drogas, el aporte negativo de los influencers en nuestro desarrollo, la violencia y su impacto en los adolescentes, y la destrucción de la familia: falta de algún rol en la formación de los hijos; fueron los proyectos premiados en la ceremonia realizada el pasado lunes en el aula magna de la Universidad Politécnica Salesiana, donde estuvieron presentes autoridades y docentes de la REA, el director de Intalent y los familiares de los graduados.

“El proyecto es el resultado del trabajo pastoral y educativo en las instituciones de la REA. Nos reunimos con varios directores de escuelas y el Psic. Diego Vera, director de Intalent, para la planificación de la escuela que forme líderes juveniles con un carácter misionero, vocacional y evangelizador”, explicó el Ing. José Baño, coordinador del plan educativo.

A través de los encargados del área pastoral de cada institución de la REA, se fueron escogiendo a estudiantes que cumplieran con el perfil requerido. Fueron 90 los aspirantes que tras un proceso de selección, iniciaron su formación en julio, cursaron módulos para la realización de proyectos, evangelización, espiritualidad, valores y coaching. Al finalizar, se presentaron 18 proyectos elaborados por los 37 estudiantes graduados.

Una de las graduadas fue Bianka Torres, estudiante de la Unidad Educativa Sagrada Familia de Nazareth, quien se mostró “feliz por haber participado de la escuela” y explicó que su proyecto “Escuela para Padres” está enfocado en combatir, a través de cursos y talleres, la destrucción de la familia por la ausencia o la falta de atención de los padres hacia sus hijos«.

La Escuela de Líderes Cristianos continuará su formación con los jóvenes de décimo año; quienes serán monitoreados por la primera promoción de graduados en la ejecución de los proyectos en las diferentes instituciones de la Red Educativa Arquidiocesana.

Guayaquil, (DCAG).- A través de la educación, formación espiritual, alimentación y el desarrollo de sus capacidades artísticas; la casa de acogida “Reina de la Paz” atiende a niños de 3 a 13 años que habitan en la Isla Trinitaria, a los que busca dotarlos de nuevas oportunidades para su futuro y alejarlos de los peligros de las calles como la delincuencia o la drogadicción. La iniciativa es impulsada por la parroquia Santa Rosa de Lima y la fundación Cree.

Este centro nació en junio de 2021 como un plan piloto de clases de nivelación escolar para 7 niños de la Isla Trinitaria. El número de estudiantes fue en aumento y tras el cierre del dispensario de Fundasen en el sector, el P. José Campoverde dispuso que las instalaciones fueran usadas para albergar a los beneficiarios de la casa de acogida “Reina de la Paz” que actualmente recibe a 50 niños.

La jornada inicia con las clases en la escuela Santa Rosa de Lima, en el recreo los niños reciben un refrigerio y al terminar las clases, se dirigen a la casa de acogida para degustar el almuerzo preparado por las Hermanas del Hogar de la Madre. Luego, se alistan para recibir clases de nivelación y realizar sus tareas con las voluntarias de “Reina de la Paz”, donde también reciben un refrigerio, según la disponibilidad. Además, se preparan para los Sacramentos de iniciación cristiana en la parroquia adjunta.

Para el P. José Campoverde, párroco de Santa Rosa de Lima, “ayudar a la casa de acogida es reconocer, sumarse a esos espacios de esperanza dentro de estos momentos que nos toca vivir en la sociedad: violencia, crimen. Es un espacio en el cual no solo pueden reconocer a la Isla Trinitaria por los tiroteos, la violencia; sino también por estos niños que tienen en ellos el germen del cambio de la sociedad”.

Otra parte fundamental de la casa de acogida son sus voluntarios, padres de familia que ayudan en la preparación de alimentos y en la enseñanza de los niños, siguiendo el ejemplo de Cristo. Pedro Toala y su esposa Tamara Tacuri, son dos de los voluntarios que han colaborado con la parroquia desde antes del inicio del proyecto, con el comedor Hermana Clare Crockett; y actualmente, ayudan en “Reina de la Paz”.

El voluntariado, las donaciones de alimentos perecibles y no perecibles para el almuerzo y los refrigerios, útiles escolares (cuadernos, lápices, pinturas, libros), uniformes o el padrinazgo para las becas que reciben los niños ha sido fundamental para mantener esta ayuda social, que siempre requiere de la generosidad de las personas o empresas que busquen sumarse y que pueden contactarse al 0979440860, al correo [email protected] o en Instagram: @reinadelapaz.ec

Guayaquil, (DCAG).- Al sonido del silbato inicial, los equipos de fútbol de niños y adolescentes de las parroquias Santa Rosa de Lima y Nuestra Señora de Czestochowa disputaron el pasado 21 de enero la gran final del campeonato de monaguillos de la Arquidiócesis de Guayaquil. El torneo fue realizado y organizado por el Seminario Mayor Francisco Xavier de Garaycoa.

La jornada inició a las 15h00 del pasado sábado, con la final en la categoría niños donde la parroquia Santa Rosa de Lima se impuso por 9 – 2 a Nuestra Señora de Czestochowa; en tanto que en la categoría adolescentes el título se lo llevó la parroquia del norte por un marcador de 3 a 2; y en el cotejo intermedio por el tercer y cuarto lugar, María Inmaculada Eucarística consiguió el bronce al ganar 2 por 0 a Ángel de la Guarda.

“La Final la vivimos en equipo con mucha fe y alegría porque sabíamos que representar el nombre de nuestra parroquia Czestochowa y nuestra vocación en algo que tanto nos gusta que es el fútbol, se sintió tan hermoso”, comentó el lateral Gabriel Pérez y un sentimiento que comparte Arturo Hernández, quien explicó que todos los partidos fueron muy reñidos y agradece a Dios y al trabajo en equipo por el triunfo logrado.

Los monaguillos de Santa Rosa de Lima en la isla Trinitaria se reunían en una cancha cercana a la parroquia para entrenar para cada partido. Una semana antes de la final, un padre de familia se comprometió a llevarlos a todos los jugadores a entrenar al Parque Samanes, para el partido también fueron padres de familia y amigos de los chicos para apoyarlos desde las gradas, explicó su párroco José Campoverde.

El compañerismo y el espíritu deportivo se hicieron presentes en todo el campeonato, los equipos recibieron medallas de participación por parte del P. Andrés Ulloa, coordinador de los monaguillos en Guayaquil y un refrigerio. Los ganadores dieron la vuelta olímpica con el trofeo. En mayo próximo se iniciará la próxima edición del campeonato de monaguillos, donde se prevé que más parroquias participen.