Guayaquil, (SCAG).- En medio del estado de guerra interna que vive el Ecuador, el pasado 24 de febrero los representantes de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional acudieron al Santuario de Schoenstatt, donde participaron de la Santa Misa por la Paz y fueron consagrados a la Virgen María por Mons. Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil.
En la Santa Misa participaron ministros de gobiernos, representantes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el Poder Judicial e invitados especiales. Mons. Luis Cabrera recordó que todos somos gestores de la paz y que tenemos la responsabilidad de ser coherentes en nuestra vida cristiana: “una oración sin acción nos aparta de la tierra; y una acción sin oración nos aleja del cielo”, destacó.
Las familias de Schoenstatt donaron productos de seguridad e higiene personal para los miembros de las Fuerzas Armadas. Al finalizar la Santa Misa, el Arzobispo de Guayaquil realizó una bendición especial para consagrar a los presentes a la Virgen de Schoenstatt. Las “Hermanas de María” les entregaron una medalla con la imagen de la Reina de la Paz.
Todos recibían con alegría su medalla, algunos la colgaron en su cuello, otros la envolvieron en su chaleco antibalas. Una testigo de este momento cuenta que un oficial, al amarrarla a su chaleco expresó: “para que me salve la vida” a lo que su compañero le respondió: “o para que te lleve directo al cielo”.
La celebración culminó con un concierto a 4 cuerdas (conjunto musical de cuatro instrumentos de cuerdas) como homenaje a la labor realizada por los miembros de las fuerzas Armadas y Policía Nacional en el combate delincuencial.
Guayaquil, (SCAG).- Por su destacada obra educativa y evangelizadora en Ecuador, la Confederación Interamericana de Educación Católica (CIEC) otorgó el Premio Jesús Maestro 2024 a Mons. Luis Cabrera, OFM., arzobispo de Guayaquil. El galardón fue entregado el pasado 13 de enero en Santo Domingo, República Dominicana.
Fueron nueve educadores (docentes, sacerdotes y religiosas) y seis instituciones educativas de Hispanoamérica, reconocidas por la CIEC en el XXVIII Congreso Interamericano de Educación Católica, realizado del 10 al 13 de enero; en el cual participó Monseñor Cabrera como presidente de la Red Educativa Arquidiocesana en Guayaquil.
“Como CIEC, estamos orgullosos de reconocer el trabajo de personas e instituciones comprometidas con la tarea educativa. Será el liderazgo de los maestros el que marque el horizonte, ayude a focalizar y decidir en cada momento por dónde avanzar en su tarea formativa”, comentó Oscar Pérez Sagayo, secretario general de la CIEC.
La destacada labor educativa y evangelizadora de Mons. Luis Cabrera Herrera, OFM se remonta a su experiencia como formador de los novicios franciscanos, docencia en Teología y religiosidad franciscana, dirección en diversos centros de formación teológica en el Ecuador, su labor como arzobispo de Cuenca y Guayaquil; además, ejercer como director de la Red Educativa Arquidiocesana (REA).
El galardón para Mons. Luis Cabrera con el premio "Jesús Maestro"; para nosotros es un impulso a seguir en esta misión de evangelizar y educar con amor, para los colaboradores de la red esto no es un trabajo, es una misión, un servicio, hacia los 12.000 niños, niñas y jóvenes que se educan en nuestras 21 instituciones, nos anima a seguir en este llamado de la iglesia para que las comunidades educativas tengan una educación evangelizadora”, expresó Sonia Cuenca, directora ejecutiva de la REA.
Guayaquil, (SCAG).- Para promover el programa de desayunos “Barrigas contentas, Corazones llenos”; Alimentos Polar Ecuador realizó el pasado 4 de diciembre una donación de 4.375 kilos de harina P.A.N. al Banco de Alimentos Diakonía, lo que permitirá gestionar más de 100.000 porciones de alimentos para niños de Guayaquil y Durán.
Como parte de la donación, se organizó un desayuno navideño para 40 niños beneficiarios en las instalaciones de Diakonía. Durante la actividad, los infantes tuvieron la oportunidad de participar en la preparación de arepas, compartiendo momentos de alegría y aprendiendo la importancia de una alimentación saludable para su adecuado crecimiento.
“Hoy celebramos más que una temporada festiva; celebramos la solidaridad, el amor al prójimo y la esperanza. Esta alianza es un ejemplo de cómo el sector empresarial marca una diferencia significativa en la vida de nuestra comunidad. Acciones como estas nos inspiran a continuar nuestra labor”, destacó Isabel Pazmiño, vicepresidente del directorio del Banco de Alimentos Diakonía.
La alianza entre Diakonía y Alimentos Polar Ecuador inició en octubre del 2022 y durante este año, la empresa ha donado más de 18.000 unidades de harina P.A.N., 600 unidades de margarina Mavesa, 600 unidades de mayonesa Mavesa y 600 unidades de queso Rikesa; facilitando la entrega de más de 385.000 desayunos a 39.000 personas durante el 2023.
Durante el desayuno navideño, Christian Robles, gerente comercial de Alimentos Polar Ecuador, valoró “la oportunidad de contribuir al bienestar de miles de niños de Guayaquil. Reconocemos el papel fundamental del Banco de Alimentos Diakonía en la distribución eficiente de los recursos para quienes más lo necesitan, confiando que estas alianzas estratégicas perdurarán en el tiempo para continuar brindando alimentos a los más necesitados”.
"Barrigas contentas, Corazones llenos" es un programa impulsado por el Banco de Alimentos Diakonía desde 2014, el cual además de la entrega diaria de desayunos contempla capacitaciones en temas de nutrición y salud, monitoreo y controles médicos.
Guayaquil, (SCAG).- Desde el pasado 8 de septiembre hasta el 15 de septiembre de 2024 se vivirá en Ecuador el “Año de la Eucaristía”, como preparación del 53º Congreso Eucarístico Internacional “Fraternidad para sanar el mundo” que se realizará el próximo año en Quito y contará con la presencia del Sumo Pontífice en el país.
El inicio de esta celebración se realizó en Quito con la presentación del Documento Base que dará fundamento teológico, pastoral y misionero al 53° Congreso Eucarístico Internacional (IEC 2024); y su culminación será el 15 de septiembre de 2024, con la “Statio orbis” del Congreso Eucarístico Internacional (Misa de clausura), la cual se prevé sea presidida por el Papa Francisco.
Para profundizar en lo que significará este evento para la Iglesia Católica; representantes de 34 países arribaron a Quito para participar de la Asamblea Plenaria del Comité Pontificio para los Congresos Eucarísticos Internacionales, la cual está presidida por Mons. Luis Cabrera, presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
“Nuestro mundo herido por tantas situaciones que aquejan su paz y su armonía, está necesitado de esta fraternidad como la mejor manera de sanar todas estas experiencias de dolor y desesperanza”, explica Mons. Alfredo Espinoza, arzobispo de Quito, sobre la importancia de vivir el “Año de la Eucaristía”.
El Congreso Eucarístico Internacional “Fraternidad para sanar el mundo” es la mayor reunión de la Iglesia Católica para reflexionar sobre la importancia de la Eucaristía en la evangelización y la renovación de la fe en el mundo. El Evangeliario, símbolo del IEC 2024, fue entronizado durante la Santa Misa de inauguración de la Asamblea Plenaria y empezará su recorrido por el Ecuador en la Diócesis de Tulcán.
En la previa al Encuentro Vocacional Arquidiocesano, este 2 de septiembre a las 14h00 en la Catedral Metropolitana de Guayaquil se realizará la consagración a la Orden de la Vírgenes (Ordo Virginum) de Grecia Marlene Murillo Cercado, una mujer fluminense que encontró en el Santísimo su inspiración para entregar su vida a Dios siendo parte del mundo.
Oriunda del recinto La Lucha (cantón Baba, provincia de Los Ríos), desde muy pequeña su madre le inculcó la fe cristiana y el rezo del Santo Rosario. Ese amor a la Virgen María fue el que impidió que tras la muerte de su madre renunciará completamente a su credo, a pesar de las invitaciones para ser parte de sectas protestantes.
En busca de nuevas oportunidades laborales, emigró a Guayaquil en donde empezó a trabajar en una cadena de electrodomésticos. Allí conoció a una compañera de trabajo y amiga que la invitó a participar de la Adoración Eucarística en la parroquia El Sagrario (Junto a la Catedral) donde sintió un amor profundo por Cristo Sacramentado.
Su creciente amor por Jesús provocó que lo visitara diariamente en el Santísimo junto a su amiga, quien por distintos motivos cambió de parroquia. Ese cambio de vida la incitó a prepararse en la parroquia Señor de la Buena Esperanza para recibir el sacramento de la Confirmación.
Aunque en su niñez su anhelo era casarse y formar una familia, en el transcurso de su vida decidió mantener su castidad y soltería para un buen hombre. Cuenta que hace varios años, empezó a darse cuenta del llamado de Dios a consagrar su castidad a Dios, algo que le trajo varios momentos incómodos en su familia y trabajo por la presión de casarse y tener hijos. Explicó que su consagración le servirá para dar testimonio de que “es posible servir a Dios siendo parte del mundo”.