Guayaquil, (DCAG).- El pasado mes de junio, el padre Luis Palacios, quien recientemente se especializó en Filosofía en la Universidad de Navarra, en Pamplona, retornó a Guayaquil. Sus seis años de estudio serán de gran ayuda para la preparación de futuros sacerdotes en el Seminario Mayor de la Arquidiócesis.
Para la Iglesia Católica, el aprendizaje filosófico posee un gran valor, especialmente en el entendimiento del Evangelio. Su estudio ayuda a revalorizar la importancia del mensaje de Cristo, recuperando su vocación original, que es la búsqueda de la verdad y su dimensión metafísica. La Arquidiócesis reconoce la importancia que tienen estos estudios y busca que ciertos sacerdotes tengan la oportunidad de especializarse en estas materias.
En sus años en el extranjero, el padre Luis vivió en un ambiente multicultural. Esta experiencia le permitió conocer la parte más humana de la Iglesia y su ideal de universalidad, junto a sacerdotes de más de treinta y cinco nacionalidades. “A pesar de ser tan diferente en cada país, la Iglesia posee una misma fe, un mismo amor al Papa, a Cristo y a la Eucaristía”, explicó.
Durante los cuatro primeros años, el padre Luis estudió el grado de Teología. Luego le ofrecieron la posibilidad de realizar un posgrado en Filosofía, durante dos años más. La formación que obtuvo en esta etapa la realizó en la Facultad de Filosofía y Letras, donde le llamó la atención la excelencia del trabajo de los docentes. Aseguró que sus maestros “no solo eran autoridades académicas a nivel mundial, sino que también tenían un alto nivel de dedicación laboral”. Al ser una universidad de carácter religioso, vio cómo cada uno de ellos buscaba una santificación diaria del trabajo ordinario.
De cara a las enseñanzas que recibió, estas le han permitido conocer mucho más al hombre, a sus problemas, ansiedades y dones, analizando la base filosófica y psicológica que existe detrás del mismo. En lo profundo del ser humano, se establecen motivos que permiten entender aquello por lo que está pasando y cuál es la ayuda que necesita.
El padre Luis Palacios regresó a Guayaquil el pasado 20 de julio, para continuar con su labor apostólica sirviendo en la parroquia Cristo Rey, ubicada en el suburbio de la urbe. También podrá compartir sus enseñanzas de Filosofía colaborando como profesor en el Seminario Mayor de Guayaquil.
