Guayaquil, (DCAG).- En la capilla San José del Panteón Metropolitano, el pasado 1 de junio se celebró la misa de exequias de 98 niños no nacidos, quienes luego fueron sepultados en el mausoleo destinado para ese fin. La celebración, organizada por el movimiento “Sí a la Vida”, fue presidida por Mons. Giovanni Piccioli.
Los bebés no nacidos son resultado de abortos espontáneos o inducidos que llegan a Proyecto Esperanza y el movimiento «Sí a la Vida» donde se realizan los trámites respectivos para su cremación y posterior sepultura. Muchos de los infantes por no haber sido bautizados se les asigna un nombre escogido por los miembros de nuestra filial, sacerdotes voluntarios y los obispos de Guayaquil.
Una de las parejas presentes fueron los esposos Ricardo Yee y Mónica Pilco, quienes por consejo del P. César Piechestein conocieron la labor de Proyecto Esperanza y pudieron brindarle sepultura al segundo bebé que perdieron por un aborto espontáneo.
“En otros lugares a partir de la semana 20 reconocen que hay un bebé y lo que nos sorprendió fue que no hay un espacio para dar cristiana sepultura a bebitos de tan temprana edad y damos gracias por este espacio brindado por la Arquidiócesis de Guayaquil y por este apostolado (Proyecto Esperanza) que llena esa necesidad de las familias que por diferentes motivos no hemos podido tener con vida a nuestros hijos”, explicaron los cónyuges.
La Santa Misa y la posterior sepultura fueron celebradas por Mons. Giovanni Piccioli, custodio de la Campana de la Vida y el P. Veraldo Plascencia, capellán del Panteón Metropolitano. Quienes deseen darle sepultura a un bebé no nacido o fallecido tras pocas semanas de vida pueden comunicarse al número 0989824199 de Proyecto Esperanza.
