Guayaquil, (DCAG).- Tras su paso como párroco del Santuario Señor de los Milagros y vicario de Daule, el P. Omar Mateo López asumió el pasado 1 de febrero sus nuevos encargos pastorales como Canciller de la Arquidiócesis de Guayaquil, en sustitución del P. Tirso Varela que fue designado como párroco de la catedral de Santa Elena.
Nacido el 26 de noviembre de 1976 en el cantón La Libertad, tanto sus estudios primarios y secundarios los hizo en su ciudad natal. Luego entraría al Seminario Mayor de Guayaquil y cursaría sus estudios de Filosofía y Teología en la Universidad de Navarra. También tiene un doctorado de la Universidad de la Santa Cruz en Derecho Canónico, Máster en Bioética por la Universidad Regina Apostolorum y un diplomado de Derecho Internacional y Diplomacia en la Pontificia Academia Eclesiástica.
Para el sacerdote, este “es un reto nuevo y como sacerdote debo estar dispuesto a aceptar esos retos que la autoridad eclesiástica nos propone y yo lo he recibido con mucha alegría y entusiasmo porque se trata de una nueva realidad en la parroquia y en la cancillería. Intentaré no defraudar y pondré todos mis conocimientos adquiridos para ver esa perspectiva pastoral que tienen los papeles, detrás de ellos hay personas a las que no solo hay que tratar de modo administrativo, sino pastoral”, manifestó.
Las funciones del canciller a nivel eclesiástico consisten en el archivo y la custodia de los documentos eclesiales, certificar las emitidos por el Arzobispo, encargado de distintos temas relacionados con la vida pastoral de los sacerdotes, movimientos eclesiales, personas consagradas, etc.
Aunque ha tenido experiencia en cargos administrativos anteriores, explica que mientras trabajó como secretario personal de Mons. Juan Larrea Holguín (+) aprendió y admiró mucho de su mentalidad jurídica en la organización de la curia, la oración diaria y el trato con los sacerdotes; y ahora prevé ponerlo en práctica, ya que considera que el orden ayuda mucho en el tema pastoral.
Tras su ordenación el 18 de noviembre de 2001, trabajó como secretario del entonces Arzobispo de Guayaquil, vicario de la parroquia El Sagrario, profesor de Derecho Canónico en el Seminario Mayor, colaborador parroquial de Most Holy Redeemer (Boston) y de San Giuseppe da Copertino (Roma), responsable de la pastoral de los ecuatorianos en Roma, también sirvió como Secretario de la Nunciatura Apostólica en Puerto Príncipe (Haití), párroco de San Juan Pablo II, San José Obrero y Narcisa de Jesús en Guayaquil.
Fue Oficial de asuntos administrativos y promotor de Justicia del Tribunal Eclesiástico, tutor del programa de formación permanente del Clero Joven (ITePE), Secretario General Adjunto de la CEE, participó de la visita del Papa Francisco en Ecuador y delegado para la Causa de Canonización de Mons. Juan Larrea.
“Todos estamos trabajando para la misma Iglesia, tratando las almas y lo que intentamos es ganarlas para Dios, unos desde la pastoral y otros desde una oficina, pero tomando en cuenta que todo confluye en la salvación de las almas y en mi no sólo pueden encontrar un canciller, sino un pastor”, finalizó el sacerdote.
