Guayaquil, (DCAG).- Desde el descubrimiento de su vocación sacerdotal en un retiro espiritual, el P. José Fabián Acuña Cantos ha vivido diferentes etapas para cumplir con el llamado del Señor; desde su formación en el Seminario Mayor, colaborando en la parroquia María Reina hasta que el pasado 8 de mayo fue posesionado por Mons. Gerardo Nieves como párroco en la iglesia San Bernardino de Siena, sur de Guayaquil.
“Este nombramiento como párroco ha sido una grata sorpresa, puesto que es mi primera parroquia; aquella en la que puedo derramar todas mis ilusiones y expectativas. Lo primero que hay que hacer es ponerse en las manos de Dios, asegurar la oración y constatar los cimientos que han dejado los otros párrocos”, expresó el padre Acuña.
Desde su llegada después de la Semana Santa, el nuevo párroco ha identificado las diferentes necesidades pastorales de la feligresía de esta parroquia, donde no tuvieron confesiones ni Santa Misa por algún tiempo y la feligresía se ha mostrado contenta por nuevamente poder recibir los sacramentos, además de querer continuar con las obras sociales.
Antes de este encargo pastoral, el padre Fabián estuvo sirviendo en la parroquia María Reina (Puerto Azul) como seminarista, diácono y desde 2021 como sacerdote. Según explica, aprendió mucho durante su misión en esta iglesia; donde el cambio de sacerdotes, el contacto con los obispos Antonio Crameri y Gerardo Nieves; y la cercanía con la feligresía le han marcado la pauta para desenvolverse por primera vez como párroco.
Considera que “la familia se hace más grande” con los feligreses de su antigua parroquia y la actual, en donde ha organizado los cursos de catequesis y continuará con el comedor solidario que los domingos alimenta a las personas más necesitadas, donde agradece la ayuda prestada por su mentalizador, el P. Vicente Serrano.
Al finalizar, el padre Fabián dedicó a sus nuevos feligreses estas palabras: “Desde ya los quiero mucho y los llevo en mi corazón, juntos crezcamos como familia y juntos llegaremos más pronto al cielo”.
