Guayaquil, (DCAG).- El pasado 16 de junio, en las instalaciones del Refugio Resa se dio la firma del convenio de cooperación entre la Arquidiócesis de Guayaquil y la Municipalidad para atender de manera integral a 300 personas en situación de calle con el objetivo de reinsertarlos en el área productiva.
En una ceremonia en la que participaron la alcaldesa Cinthya Viteri, el arzobispo de la ciudad y otras autoridades, se llevó a cabo la firma del convenio que permitirá brindarun año atención médica y psicológica, alimentación, aseo personal, acompañamiento técnico y espiritual a cien beneficiarios en los dos albergues de Resa, así como a otras doscientas personas de manera externa.
El arzobispo de Guayaquil, Mons. Luis Cabrera, explicó que “este convenio va a ayudar enormemente a los beneficiarios y todo lo que significa su formación técnica y administrativa, de tal manera que ellos puedan ofrecer esa serie de productos que hemos visto y valorado y así sentirse parte de la sociedad, no sólo como objetos que reciben ayuda , sino como protagonistas que son capaces de producir”.
Las autoridades realizaron un recorrido por los stands de los diversos emprendimientos que hasta el momento tienen los beneficiarios de Resa. La Alcaldesa se comprometió a apoyar estas iniciativas a través de sus redes sociales.
El proyecto ayudará en la reinserción social de personas como Miguel Cáceres, un beneficiario de Resa que tras el inicio de la pandemia se vio obligado a vivir en la calle y que ahora cuenta con un emprendimiento de venta de artesanías que le permite sustentar parte de sus gastos y ayudar a sus familiares en Venezuela.
