Elaborado por: Kevin Yépez Morán
Guayaquil, (DCAG).- Promover un espacio de formación, oración y reflexión, ayudando a jóvenes universitarios a tener un encuentro profundo con Jesús, es el objetivo de “Acción Universitaria”, programa creado por un grupo de estudiantes de la Escuela Superior Politécnica del Litoral, con el fin de dialogar sobre temas eclesiales y sociales desde una perspectiva católica.
Dentro de las actividades mensuales que realiza la pastoral universitaria están fomentar el rezo del Santo Rosario, brindar un espacio de oración a los jóvenes junto al Santísimo y el desarrollo de un club de lectura sobre los escritos del Papa emérito Benedicto XVI. Todas estas actividades se llevan a cabo gracias al acompañamiento y guía de los sacerdotes de la Arquidiócesis de Guayaquil.
Bryan Cansing, colaborador de la pastoral en la Espol, explicó que esta iniciativa cumplirá en octubre ocho años congregando a decenas de estudiantes que necesitan tener un espacio para un encuentro personal con Jesús. “Durante la etapa universitaria, muchos jóvenes que pertenecen a grupos parroquiales o movimientos, dejan de perseverar en ellos por falta de tiempo. Es evidente que el compromiso que ahora ellos adquieren es con su profesión y descuidan su vida espiritual".
“Acción Universitaria”, desarrolla programas de voluntariado que asisten al trabajo que realizan las Siervas del Hogar de la Madre y las Siervas del Plan de Dios, comunidades religiosas dedicadas al servicio de los más vulnerables. Los programas se desarrollan de 13h30 a 14h30 en la Facultad de Ciencias de la Vida y en el Centro de Información Bibliotecario de la ESPOL. Para mayor información puede comunicarse al teléfono 0963138402 o escribiendo a su cuenta de facebook @accionistaespol.
Guayaquil, (DCAG).- Con la premisa de ser un llamado de conciencia a defender el derecho de la vida, fue fundida hoy en Przemyśl (Polonia) la campana denominada “Voz de los no nacidos” que llegará al Ecuador como un regalo de la fundación polaca “Sí a la vida” y que también contará con la bendición del Papa Francisco.
“Esta campana es un símbolo religioso que tiene un simbolismo inmenso porque nos llama a defender el valor de la vida y ojalá su sonido pueda llegar y penetrar en el corazón de muchas personas de nuestro pueblo y sobretodo de los políticos y quienes trabajan en distintas áreas sociales y políticas”, comentó Mons. Giovanni Battista Piccioli, obispo auxiliar de Guayaquil.
La campana de bronce está rodeada de dos códigos genéticos que simbolizan a los padres. En uno de sus lados hay una ecografía de un niño concebido y dos querubines que simbolizan la presencia de Dios en cada concepción humana; y por el otro, muestra dos tablas de piedra con las frases “No penséis que he venido a abolir la ley” y “No matarás”, que simbolizan los 10 mandamientos de Dios.
Para nuestro país, se agregarán dos palmas de manos que formen un corazón y en cada una de ellas las banderas del Ecuador y Polonia, al igual que el escudo nacional y el águila, símbolo polaco. Además tendrá la frase: “Respeta, defiende, ama y sirve a la vida, a toda vida humana”, un extracto del numeral 5 de la encíclica Evangelium vitae de San Juan Pablo II.
El obispo de Guayaquil explicó que la campana de una tonelada de peso, tras su fundición en el taller de Jan Felczyński en Polonia, será trasladada a Roma para que el Sumo Pontífice la bendiga el próximo 27 de octubre, luego llegará a Ecuador a mediados de diciembre para recorrer de manera itinerante las diferentes parroquias eclesiásticas del país que la soliciten, mientras que su ubicación final está por definirse.
La iniciativa fue lanzada el 26 de agosto de 2020 durante la celebración de Nuestra Señora de Czestochowa en Polonia por la fundación "Życie Tak". El primero en hacerla sonar fue el Papa Francisco, quien mencionó: “Que esta Campana despierte las conciencias del derecho a la vida en Polonia y en el mundo, así como a las personas de buena voluntad ''.
Guayaquil, (DCAG).- La Orquesta Filarmónica Municipal de Guayaquil brindó el pasado 25 de julio un concierto en homenaje a los 485 años de fundación de Santiago de Guayaquil. Entre las canciones interpretadas estuvo la canción "María Madre de Guayaquil". El evento se llevó a cabo en el Teatro Centro de Arte.
Bajo la dirección de David Harutyunyan, una veintena de músicos interpretaron diferentes melodías. Entre música clásica, salsa o boleros; se dedicó un bloque exclusivo para tocar las canciones que representan a los guayaquileños; pasillos o canciones tan icónicas como “Guayaquileño Madera de Guerrero".
La canción "María Madre de Guayaquil" representó la fe cristiana del guayaquileño; su amor hacia Dios y a la Virgen María, las procesiones del Cristo del Consuelo en Semana Santa, las novenas en honor al Niño Jesús, su devoción a Santa Narcisa de Jesús y su participación en la Santa Misa.
[video width="640" height="360" mp4="http://www.arquidiocesisdeguayaquil.org.ec/wp-content/uploads/Orquesta-toca-María-Madre-de-Guayaquil_001.mp4"][/video]Joffre Soria, autor de la canción, mencionó que “mi esposa y yo desde que empezaron a tocar las primeras notas y pudimos captar la interpretación de la orquesta, sentimos una emoción muy grande y así mismo lo tomamos con humildad, puesto que nombramos a nuestra Madre como Madre de Guayaquil y ella es la que nos da esa sensación de que este trabajo viene de arriba, del cielo”.
La inclusión de una canción mariana dentro del repertorio en homenaje a Guayaquil es un reconocimiento al trabajo de los diferentes músicos católicos, quienes han venido realizando diferentes producciones musicales con el objetivo de propagar el mensaje de Cristo.
Guayaquil, (DCAG).- Como parte de las actividades del año jubilar por su 50º aniversario de creación, las Hermanas de la Sociedad de Cristo celebraron una Eucaristía de acción de gracias el pasado 20 de agosto en la parroquia San Antonio de Padua (Urdesa Norte).
La comunidad religiosa fue fundada en 1973 en Barranquilla por la madre Blanca González Aristizábal, quien tuvo la revelación de la Virgen María que le manifestó: “Bésame el corazón” y se presentó “Yo soy Santa María de la Fidelidad”. La congregación fue extendiéndose por todo Colombia, albergando el noviciado en Bogotá. También cuenta con sedes en Venezuela y Ecuador. En Guayaquil cuentan con una casa ubicada en Urdesa Norte (calle Quinta y segundo callejón, 108); además de una capilla para su advocación mariana, siendo su superiora la hermana Fanny Grisales.
“En este año jubilar estamos rezando mucho y con mucha alegría porque es una bendición de Dios, son 50 años que cumple nuestra comunidad y cada una de las hermanas lleva grabado en el corazón nuestro carisma y el trabajar con los niños es ese alimento diario porque les podemos dar a conocer a Dios”, explicó la hermana Miriam, miembro de la comunidad.
Con su carisma de catequesis y evangelización, las hermanas fundaron hace varios años la escuela República del Perú donde reciben educación primaria 279 estudiantes; además realizan labor social entregando alimentos y llevando el Evangelio a diferentes sectores del sur de la ciudad.
Para la docente Rosa Rodríguez, el trabajar desde hace 5 años en la escuela ha significado un crecimiento profesional y espiritual pues ha aprendido sobre su fe católica y ha compartido los conocimientos en valores con sus estudiantes. Además, se mostró agradecida por compartir con las religiosas de la Sociedad de Cristo.
Su año jubilar culminará el 11 de febrero de 2023 cuando cumplirán los 50 años de fundación de la comunidad.